jueves, 18 de diciembre de 2014

Ser educador social frente al maltrato y el acoso a los menores

El maltrato y el acoso que sufren algunos menores es algo que puede evitarse con una buena intervención a tiempo y prestando atención a todos los indicios que muestren esta situación.
Muchos son los niños que sufren en silencio el fenómeno del  bullying cada día en la escuela sin que ni los profesores ni sus padres se alarmen. En muchos casos, los signos pasan inadvertidos y en otros casos, se les resta importancia… “Es cosa de niños”. Sin embargo, las consecuencias negativas que produce este tipo de acoso en los menores, tanto a corto como a largo plazo, pueden influir en numerosos ámbitos de su vida: a nivel académico, personal, afectivo, social, laboral, etc.
Las victimas del acoso suelen presentar símbolos claves a lo que debemos estar atentos: pierden o se deterioran sus pertenencias escolares, aparecen con golpes y rasguños de forma frecuente, no quieren salir ni se relacionan con sus compañeros, no acuden  a excursiones o cumpleaños, quieren ir acompañados a la entrada  y a la salida y protestan o se niegan a la hora de ir al colegio.
Los profesionales de la educación, y en este caso centrándonos en la figura del educador social, tienen el papel de estar atentos a este tipo de indicios y de informar a los padres sobre la importancia de observar estos detalles. Así mismo, deben concienciar a los menores sobre la peligrosidad del acoso y promover entre ellos la empatía para que sean capaces de comprender como se sienten las victimas del bullying. Hay que insistir en la idea de que no son casos aislados y que es un tema de gran importancia sobre el que hay que intervenir.
También es importante que los menores sepan qué hacer  cuando presencian una situación de  acoso. Algunas pautas  que se deben seguir son: hacer que el agresor sepa que está haciendo algo mal, insistir en que pare, avisar al adulto más cercano, hacer que  la víctima se lo cuente a sus padres o tutores, ofrecer a  la víctima hablar con alguien en su nombre si él no se atreve, no vengarse del agresor por medio de la violencia.
En lo que se refiere a la víctima es importante intervenir con ella y aconsejarle sobre cómo debe actuar ante el agresor. Algunas pautas a seguir son: ignorar al agresor, no mostrar signos de que te afecta, responder al agresor con tranquilidad y firmeza, tratar con humor la situación, alejarse del agresor si se prevé peligro y acudir a un adulto.
Para detectar una situación de acoso, el educador social debe prestar especial atención a los siguientes indicios:
                - La relación de los alumnos en los pasillos y en el patio. Los peores momentos ocurren              cuando no hay profesores delante.
                - Las pintadas en las puertas de los baños y paredes.
                - La no participación habitual en las salidas.
                - Darle importancia a las risas o abucheos repetidos hacia determinados alumnos.
                - El absentismo a clase.
                - Estar atento a aquellos alumnos que sean diferentes.
                - Quejas de un menor por ser insultado numerosas veces.
                - Falta de los materiales de algún menor con mucha frecuencia.
                - Cambios  de ánimo inexplicables.
                - Escasas relaciones con los  compañeros.
                - Evidencias físicas de violencia de un menor.
                - Variaciones del rendimiento escolar de un alumno.
                - Quejas de los padres puesto que su hijo se niega a ir a la escuela.
Todo esto son indicios de una posible situación de bullying, pero no hay que esperar a que se den todos los puntos, sino que a la mínima muestra es conveniente intervenir para frenarlo, antes de que la víctima se haya visto superada por el acoso.
Otra función muy importante del educador social en este ámbito, no es sólo frenar la situación de acoso y aconsejar a la victima y a su entorno sobre como deben actuar, sino que también es necesario trabajar directamente con la victima a nivel personal temas como la autoestima, la inseguridad, la incapacidad para interaccionar con los demás, etc.
Por otra parte, para que no vuelva a repetirse, también podría ser interesante trabajar con el agresor con el fin de que reflexione y llegar a la causa de su comportamiento, que habitualmente suele ser la envidia y la falta de autoestima que intenta cubrirse sintiéndose superior al resto.
En definitiva, el acoso que sufren los menores no son casos aislados sin importancia, sino que es algo muy grave sobre lo que se debe informar, concienciar e intervenir. Para ello, el papel del educador social frente a estas situaciones es fundamental, porque representa el apoyo que necesita el menor para mediar entre él y su agresor.





domingo, 26 de octubre de 2014

Servicios sociales y bienestar. ¿Europa, un modelo social en quiebra?

El Estado de Bienestar hace referencia a los acuerdos institucionales entre el Estado, el mercado y la familia para la protección y promoción de la calidad de vida de las personas.
El Estado de bienestar se sustenta sobre 5 pilares: las transferencias sociales (pensiones), los servicios públicos, normas y sanciones para proteger a los ciudadanos, creación de buen empleo (el Estado de Bienestar no es sostenible con precariedad laboral) y reducción de las desigualdades sociales.
En principio, esta reflexión se va a centrar en el estudio del Estado de Bienestar en Europa, mas concretamente en España. Y a continuación, se estudiará la situación del Estado en EE.UU.
El Estado de Bienestar debe centrar sus actuaciones en mejorar la calidad de vida de las personas, manteniendo un mínimo nivel de vida, es decir, siempre debe de haber un red de seguridad. Sin embargo, debido a que en muchos casos es muy poco el dinero que se destina a esta labor, los resultados son escasos. Centrándonos en España, observamos que el sistema del Estado de Bienestar que se ha desarrollado, se encuentra, en todas sus dimensiones, a la  cola del resto de países Europeos. Las causas se deben al escaso prepuesto destinado al sector publico y a las ayudas sociales, ya que España se gasta muy poco en su Estado de Bienestar.
Observando detalladamente todos los sectores que sufren un déficit, destacan el de sanidad, el de educación y el de las ayudas sociales, ya que es donde mas recortes se han hecho. Esto se debe a que, el gobierno Español, al entrar España en un estado de crisis económica, desarrolló diversos planes de recortes económicos como forma de ahorro, y los oriento hacia sectores de gran importancia para la calidad de vida de las personas, es decir, a partir de estas reformas, el Estado de Bienestar dejó de ser pleno porque no atiende al 100% las necesidades de las personas.
En el caso de la sanidad pública, el gasto público social dirigido a la misma es muy bajo, lo cual afecta a los usuarios que utilizan este servicio, puesto que no reciben toda la ayuda y comodidad que deberían debido a la falta de recursos en los hospitales. Como consecuencia de esto, la sanidad privada ha aumentado y tiene mas privilegios.
Por otro lado, el gasto público dirigido a la educación también es muy bajo y más si lo comparamos con otros países europeos. Si analizamos la situación, la educación pública ha sufrido unos recortes muy perjudiciales para los alumnos y también para el profesorado, que no benefician nada el desarrollo del Estado de Bienestar. Cada profesor tiene más horas de clase, lo cual tiene como consecuencia que se necesiten muchos menos; las clases han aumentado el número de alumnos lo cual no favorece el aprendizaje individualizado y provoca el fracaso escolar, más aún en el sector público donde estudia la mayor parte de la población inmigrante y con mayores dificultades académicas. Y como ya ocurría con la sanidad, el sector privado, en este caso educativo, cada vez se extiende más.
Por ultimo, otro sector que presenta un déficit importante, es de las ayudas sociales. La atención a personas dependientes o con necesidades es muy limitada, y las ayudas a las familias, como escuelas de infancia, becas de ayuda para familias sin recursos, las pensiones, etc., son escasas e incluso inexistentes en muchos casos, y esto tiene muchas consecuencias negativas porque la falta de ayuda y de recursos impide a las personas desarrollarse y tener posibilidades de entrar en el mercado de trabajo.
Con todo esto quiero decir, que no se puede hablar de Estado de Bienestar, cuando, para evitar unas crisis económica la solución es dirigir menos presupuesto a la protección social que es la que define al propio Estado de Bienestar, porque de esta forma, no solo es que no se cumpla el propósito del Estado de Bienestar de atender las necesidades de las personas y mejorar su calidad de vida, sino que ademas, al no potenciar el desarrollo de toda esta gente, la crisis económica perdurará en muchas casas acompañada también de una crisis social en todo el país.

Atendiendo ahora a la situación de Estados Unidos, observamos que se trata de un Estado que no se preocupa por la calidad de vida de la población, y esta totalmente fuera del Estado de Bienestar. Anteriormente, hemos hablado de todas las carencia que presenta España, sin embargo, en Estados Unidos,  El Estado ni si quiera proporciona unos servicios mínimos de ayuda. Siempre se habla de Estados Unidos como la gran potencia mundial, pero realmente, esto únicamente hace referencia al mercado, puesto que a nivel social, las personas de un nivel socio-económico medio o bajo no reciben beneficios o ayudas.
La sanidad, como ya es bien sabido, es totalmente privada solo se atiende sin seguro medico en caso de urgencia y este no empieza a ser un derecho hasta que la personas no es mayor de 60 años. De esta, gran parte de la población estadounidense vive sin seguro médico.
En lo que respecta a la educación, se trata de un modelo educativo muy competitivo puesto que cuanto mayor sea el fracaso escolar en el colegio menos ayudas y subvenciones recibirá dicho centro. Por lo tanto, si el fracaso escolar supone esto, los profesores no orientan a sus alumnos para que aprendan para un futuro, abran su mente, desarrollen sus habilidades, obtengan una educación global y basada en valores, sino para que aprueben los exámenes con buenos resultados. Si es así, puede ser que el nivel académico aparente sea alto, con altas tasas de aprobados y resultados favorables, sin embargo, en la realidad, todos estos estudiantes carecerán de valores y aprendizajes globales que les sirvan no solo para aprobar un examen, o valerse en un trabajo concreto, sino para valerse en la vida, que es lo importante.
En definitiva, así es como funcionan en Estados Unidos dos de los servicios más importantes y vitales para la población. Y es que se trata de una país que ha invertido machismo en el mismo, pero no en su población.

En conclusión, El Estado de Bienestar debe atender a las necesidades y a la seguridad de las personas, a mejorar su calidad de vida. Y esto no puede cumplirse, si el gasto publico no se invierte en los servicios que permiten cubrir estas necesidades y no se crea empleo que permita que todo siga su ciclo correcto y vaya creciendo. Por lo tanto, no hay tanta  diferencia entre un país que aclama tener Estado de Bienestar pero que luego no tiene los medios suficientes para poder llevarlo acabo de forma correcta y en el cual el sector privado cada vez se extiende mas, con otro país en el que el sistema del Estado no tiene esta característica.
Por ultimo, en mi opinión, considero que el Gobierno de España debería tratar de solucionar esta situación planteándose de otra forma la redistribución del presupuesto, porque de esta forma, si fuera todo más equitativo, se prestará mas atención a las necesidades sociales y los recortes fueran destinados a sectores menos importantes, si podríamos hablar de Estado de Bienestar pleno.

Sandra González Silva.